Apágame la vela María

En los próximos días donde Venezuela ve el fin del mundo maya gracias a la debacle energética, todo parece indicar que sucederá. Cada hombre es responsable de los actos que comete ¿y cómo no va a ocurrir el desastre en esta tierra si los que están encima del burro dicen una cosa y el burro dice otra?.

Tengo tiempo escucharle decir a un familiar que trabaja con la eléctrica del país en Maracaibo que el sistema de proyección a la inversión de nuevas plantas termoeléctircas viene siendo utilizado desde hace un gran rato en las fiestas de navidad, fin de año y carnavales, hablando en terminos de desviación de fondos sin sumar los pagos a marchas, pago de autobuses, asistencia a marchistas, esas que hubo como arróz picao' en años electorales. Así como se invierte en armas cuando nuestras escuelas están en el piso, ahora se habla de sequías las culpables del problema eléctrico.

Sabio fué aquel Faraón (Ramses II) que aceptando las interpretaciones de sus sueños que le hacía el hebréo José, el hijo de Jacob, se preparó para el tiempo de las vacas flacas. Cuando tuvo la abundancia ahorró y aprovechó para solventar aquel tiempo. En este gobierno el valor de la planificación y preevención tiene una suerte de loterias que solo se pega una cuando sale por casualidades de la vida, pero en cualquier otro caso en materia de dengue, malaria, gripes, la corrupción, la pobreza, el desempleo, la devaluación, el agua, la inseguridad... la luz, todo repunta.

¿Y pretenden convencerme a mí que el peo de que no haya luz es de la sequía?, aun me pregunto siendo Kuwait petrolera, rica y sin agua ¿cómo hacen para tener luz sin tener un solo río...?

Apágame la vela María, que me voy a dormir a ver si escampa cuando amanezca.